5 motivos por los que jugar a padel

Si hay un deporte cuya práctica se ha puesto de moda en los últimos tiempos ese es, sin duda, el pádel. Mujeres y hombres de todas las edades, con mayor o menor preparación física, se han apuntado a la fiebre por la pala

Si hay un deporte cuya práctica se ha puesto de moda en los últimos tiempos ese es, sin duda, el pádel. Mujeres y hombres de todas las edades, con mayor o menor preparación física, se han apuntado a la fiebre por la pala y las instalaciones para este juego se han multiplicado desde su boom hace años. Una pala, pelotas, ropa deportiva adecuada, una pista y uno (o varios) compañeros de juego son todo lo necesario para comenzar en este deporte que vive su momento de mayor popularidad. Pero, ¿a qué se debe su éxito? Desde luego, el pádel tiene una serie de beneficios que dan motivos más que suficientes para practicarlo:

1. Sirve para perder peso.

Aunque no es un deporte puramente aeróbico, sí implica movimiento continuo, carrera, cambios de ritmo y pequeños saltos. Todo eso conlleva la pérdida de grasa corporal y, por consiguiente, reduce el peso, haciéndolo además de una manera amena y divertida, sin que la persona sea consciente de ello.

2. Mejora la salud.

Y no únicamente por la pérdida de kilos. La práctica del pádel favorece el fortalecimiento y la tonificación de la musculatura de nuestro cuerpo, especialmente de los brazos y del tren inferior (glúteos, abdomen y piernas). Además, mejora el sistema respiratorio y cardiovascular, previene enfermedades como la diabetes o la osteoporosis, estimula la rapidez mental y potencia la capacidad de concentración.

Foto: Universidad Pablo de Olavide
Foto: Universidad Pablo de Olavide

3. Rejuvenece el cuerpo.

La agilidad física, la capacidad de reacción y los reflejos se ven favorecidos con la práctica de este deporte. Cuerpo y mente se ven rejuvenecidos; los efectos de su realización continua rápidamente benefician al deportista física y psicológicamente, ya que también se agiliza la mente.

4. Mejora la autoestima.

El beneficio físico que proporciona la práctica del pádel hace que la persona se sienta bien cuando se mira al espejo. Por otro lado, la liberación de endorfinas durante la práctica del deporte y la necesidad de concentración para el juego hace que la mente se libere del estrés y las preocupaciones, además de facilitar la conciliación del sueño.

5. Permite conocer gente nueva.

Para practicar pádel, se necesita un mínimo de dos personas, por lo que al no ser un deporte individual, fomenta la socialización. Se puede jugar uno contra uno o por parejas; en cualquiera de los casos, sirve para realizar actividades nuevas en pareja, quedar con amigos o conocer gente nueva, ya que muchas pistas dan la opción de jugar ligas internas o realizar torneos. Favorece la comunicación y el entendimiento, necesarios para obtener buenos resultados.

Todos estos motivos son más que suficientes para comenzar a practicar un deporte que no para de generar cada vez más adeptos.

La fiebre del pádel está más viva que nunca.