Alejandra Salazar mejor jugadora del año, la Maestra

Ni una de las gemelas Sánchez Alayeto ni su compañera Marta Marrero, la mejor jugadora del año 2015 según los World Padel Awards ha sido Alejandra Salazar. Aunque su nombre en inglés pueda resultar un tanto pomposo, estos premios buscan convertirse en una especie de Balón de Oro del pádel.

No nos sorprende que la madrileña haya sido reconocida por el mundo del pádel. Se trata de una de las mejores jugadoras del mundo y que este año ha dado un paso adelante. “Quizá este año he tenido más golpes destacados”, ha declarado estos días Salazar una de las mejores jugadoras del ranking world padel tour.

Con 31 años, la padelista de Head es una de las figuras más importantes del circuito,y una de las más queridas entre los aficionados. Su final de temporada ha sido excepcional, venciendo en el Master de Valencia a Reiter y Navarro, las grandes sorpresas del torneo.

Pero el punto culminante llegó en el Master Final de Madrid, donde doblegaron en la final a las número 1 Mapi y Majo Sánchez Alayeto.

Un golpe en la mesa en el que ha tenido mucho que ver la compenetración que ha alcanzado con su compañera Marta Marrero:

“cada vez hay más sintonía con Marta que ha evolucionado mucho. Lo que ha vivido en el tenis le ayuda para controlar los momentos de mayor exigencia mental. Este año hemos jugado partidos de tres horas y ya dominamos los instantes de gran tensión”.

La nueva temporada 2016, promete y mucho para Alejandra, prueba de ellos es la apuesta que Head ha hecho con su nuevo modelo la Head Graphene Delta Motion, que supone una renovación total del modelo que hasta ahora llevaba la jugadora y cambia a una pala con diseño poligonal.

Por su parte, PadelSpain ha elegido a Pablo Lima como mejor jugador del 2015. El brasileño ha sido la revelación de la temporada, cumpliendo con el gran reto de estar a la altura del mejor jugador del mundo, su compañero Fernando Belasteguin.

Un reconocimiento para un jugador que sufrió una aparatosa lesión en las semis del Master Final y que le impidió terminar con buen sabor de boca un año que, de cualquier manera, ya será inolvidable en lo positivo.