Guía práctica para mejorar el agarre de la pala en pádel

Es muy importante que sepamos cómo agarrar bien la pala para poder realizar esos golpeos tan deseados y sobre todo poder evitar posibles lesiones molestas

El pádel es un deporte donde se avanza relativamente rápido y donde el aprendizaje se consigue en pocas sesiones con pasos agigantados. Sin embargo es fácil caer en el error de automatizar gestos que influirán negativamente en nuestro juego por subir de nivel sin tener unas nociones básicas del deporte. El agarre de la pala es uno de dichos preceptos que puede influenciar el resto de gestos técnicos e incluso puede generarnos lesiones a medio y largo plazo si no sujetamos las palas padel como toca. En el artículo de hoy queremos daros algunos consejos prácticos que harán mejorar el agarre de la pala para avanzar de nivel de manera segura.

Empuñadura continental, la recomendada

En anteriores post os enseñamos la técnica para elegir el tipo de agarre para nuestra pala recomendando principalmente la más usada: la empuñadura continental. Nos atreveríamos a decir que es lo primero que se debe enseñar en las formaciones iniciales de pádel, para que el resto de ejecuciones técnicas se realicen con eficacia. Es también conocida como “empuñadura tipo martillo” ya que imita al gesto de coger dicha herramienta. Se trata de una empuñadura segura que deja a la muñeca en una posición neutra sin que existan oscilaciones laterales de la misma que puedan comprometer a la articulación. El primer paso, por tanto, es revisar la empuñadura que utilizas normalmente para ajustarla de una manera correcta.

Paquito Navarro enseña cómo es la empuñadura continental en su tutorial de DaleCandelaTv

Trabaja la fuerza muscular

De nada sirve colocar de forma idónea la posición de la mano sobre la pala si no tenemos la suficiente fuerza para aguantar el peso de la misma durante todo un encuentro o entrenamiento, con sus respectivos golpeos de potencia que conlleva. Es algo que suele pasarse por alto pero que puede derivar en lesiones tan típicas del pádel como la epicondilitis lateral. Esta patología es fruto de un agarre incorrecto y de un déficit de fuerza en los músculos que se encargan de soportar el peso de la pala y los movimientos de la misma.

Para evitar esta y otras lesiones derivadas de ello es imprescindible que dediques una parte de tus entrenamientos a trabajar la fuerza de la musculatura del antebrazo. Puedes realizar ejercicios isométricos donde se implique a los músculos que trabajan al cerrar la mano, además de movimientos que refuercen el antebrazo. Una simple banda elástica o una pelota antiestrés servirán para que tu agarre de la pala sea eficaz y eficiente, alejándote de lesiones comunes entre los jugadores de pádel.

Overgrips para mejorar el agarre

El overgrip padel nos ayuda, sin ninguna duda, a mejorar nuestro agarre ya que estamos aumentando el grosor de la empuñadura según el tamaño de nuestra mano. La teoría dice que pongamos overgrips hasta que, una vez agarrada la pala, nos quepa un dedo entre la mano y la empuñadura. Ten en cuenta que estos overgrips deben sustituirse cada cierto tiempo para evitar problemas en la muñeca, por debajo de los overgrips suele existir el grip de padel que es el primer elemento de agarre entre la pala y la mano, cuando compramos la pala no hay overgrips pero si grips, por norma general de color negro.

Mapi, Majo, Ariana y Martita llevan sus respectivos overgrips en cada partido

Otras ayudas

El progreso en el mercado del pádel ha facilitado en gran medida el desarrollo del juego con ciertas ayudas como el magnesio, fijaciones o ciertas sujeciones de la pala a la mano. Si crees que el problema de muchos de tus golpeos proviene del agarre de la pala, es el momento de plantearte añadir alguna de estas ayudas para su sujeción, de manera complementaria con los consejos anteriormente mencionados.