El «tapering» en un torneo o partido de pádel

¿Qué es el tapering? ¿Para qué sirve en el deporte? ¿Cómo se aplica en el pádel? Todas las respuestas a estas preguntas en este artículo de escuela de pádel

Cualquier deporte se rige por los fenómenos de adaptación que posibilitan una mejora en el rendimiento físico y técnico-táctico del deportista, más aún cuando existen competiciones que deben ser planificadas. La periodización aumenta de importancia conforme incrementamos de nivel en el pádel y, en mayor o menor medida, también tenemos que aplicar las estrategias oportunas para poder rendir al máximo durante la competición. En esta sección de clases padel, vamos a aprender qué es el “tapering”.

Se basa en el fenómeno de supercompensación que busca un incremento del estado de forma respecto a periodos anteriores. Preparar un partido o un torneo importante, en cuanto a tiempos se refiere, también forma parte del entrenamiento. Hoy queremos además, darte las puntualizaciones básicas para que llegues al día del encuentro en el máximo estado de forma posible.

Objetivos del tapering

Podríamos definirlo como el periodo preparatorio hacia un torneo o partido de pádel, en el cuál realizamos modificaciones en el volumen de entrenamientos y en la intensidad para llegar en el máximo estado de forma posible a la cita. Al contrario de lo que mucha gente cree, el tapering no busca un estado de recuperación del deportista sino un cese en las adaptaciones que no hagan mermar el estado de forma del jugador durante los días de torneo o el mismo día del partido.

Todo ello debe planificarse con tiempo para que los efectos adaptativos del entrenamiento no influyan en las fechas del torneo o partido. Es imprescindible situar el periodo competitivo como objetivo primario, y de ahí planificar hacia atrás creando un periodo de entrenamiento y una pretemporada inicial. El tapering correspondería con ese periodo competitivo. También hay que destacar que partidos o torneos menos importantes también pueden formar parte del periodo de entrenamiento sin que necesariamente exista un tapering previo. Debemos priorizar las competiciones y focalizar nuestros entrenamientos hacia aquellos encuentros más importantes.

El equilibrio es otra de las cualidades que debe regir en el periodo de tapering. Aunque no busques un aumento en el rendimiento por adaptaciones fisiológicas y musculares tampoco se debe reducir el volumen de manera brusca e intensa para evitar una situación de desentrenamiento que nos llevaría a una baja forma el día del torneo. En el siguiente punto se explicará, de manera general, las estrategias más importantes para aplicar el tapering de manera específica en el pádel.

Cómo aplicar el tapering en pádel

Existen múltiples factores que afectan al desarrollo íntegro del tapering como concepto precompetitivo: categoría, nivel, torneo, tiempo de preparación previa… Sin embargo existen algunas recomendaciones básicas que pueden ser comunes a nivel global para el pádel. Debemos prestar especial atención al volumen de entrenamientos, a la intensidad y al tipo de sesiones que realizamos. El volumen de entrenamiento es la cantidad de minutos o sesiones que acumulamos a lo largo de la semana.

En periodos de pretemporada este volumen es muy elevado ya que los requerimientos metabólicos y musculares deben ser crecientes para generar efectos de supercompensación en el organismo. Durante el tapering, que comenzará entre 7 y 14 días antes del encuentro, se debe disminuir el volumen entre un 40% y 60% la semana anterior y hasta un 80% en los días previos al encuentro. Esto quiere decir que si competimos un fin de semana, durante la semana entrenaremos 1 o 2 veces al principio de la misma, con una selección de ejercicios e intensidad específico.

Respecto a la intensidad, y al contrario de lo que mucha gente cree, no se debe disminuir demasiado. Aquellas únicas sesiones que realicemos en la semana previa a un partido deben ser exigentes, con demandas fisiológicas similares a los esfuerzos que realizaremos. De lo contrario entraremos en una situación de desentrenamiento. Lo último, aunque no menos importante, tiene que ver con los objetivos de trabajo y el tipo de sesiones que desarrollaremos en el tapering. Debemos priorizar el entrenamiento técnico-táctico específico para el partido pero con ejercicios de movilidad global y de activación cercana al 80% del máximo. La integración de la preparación física con la técnica y la táctica serán fundamentales en los periodos de tapering específicos del pádel.