Cada vez son más las personas que se aficionan a la práctica regular del pádel. Sin embargo, para poder evolucionar en el juego y alcanzar un mayor nivel, se necesita conocer, además de las reglas básicas, las técnicas (movimientos, posiciones, tácticas…) que se emplean en las diferentes fases de un partido, en esta ocasión hablaremos de los giros tan característicos del pádel y que se comienzan a dominar cuando tenemos un nivel de juego bastante alto, por norma general alrededor del 4.
El elemento que caracteriza al pádel y lo diferencia de otros deportes de raqueta como el tenis es la existencia de paredes que cierran la pista donde se practica. Estas condicionan el desarrollo del juego y, por tanto, resulta fundamental aprender a adaptarse a ellas: qué distancia tomar para atacar y para defender, cuándo y cómo separarse o cómo realizar un giro; este último es muy importante para poder devolver una pelota en condiciones.
Como ejecutar los giros en pádel
Para saber realizar correctamente un giro, se debe contar con unos conocimientos previos. El primer paso consiste en tener una buena posición y colocarse bien. Para aquellos deportistas no profesionales de pádel, el mejor lugar para acometer una defensa se halla entre la línea de saque y la pared de fondo, ya que desde aquí se tiene al alcance de la pala tanto la pared trasera como la lateral. Cuando se adquiere un nivel alto, se puede jugar adelantando la posición base para realizar contraataques más agresivos, pero no se recomienda para iniciados o amateurs.
Lo segundo que se debe aprender es a leer la bola; esto es, predecir dónde rebotará tanto de derecha como de revés. La pared devuelve la pelota según la velocidad y el ángulo que traiga la segunda: si se trata de un tiro cruzado, el jugador ha de situarse en la trayectoria que lleva la pelota y asegurarse de que esta rebota en la pared lateral; en cambio, si viene por medio de la pista, primero chocará contra la pared del fondo y luego lo hará en la lateral. Los giros se podrán realizar tanto a derecha como a izquierda por eso es muy importante que nos situemos en la medida que nos permita el oponente en la mitad entre la pared y la raya divisoria de nuestro cuadrante.
Una vez conocidos estos dos pasos, se ha de valorar cuándo realizar el giro. Se utiliza fundamentalmente para devolver bolas rápidas que botan mucho o cuando no se sabe si la pelota va a abrirse o a cerrarse en la esquina. Una vez se intuye en qué pared rebotará primero, el jugador retrocederá y realizará un desplazamiento en forma de círculo, hacia atrás, siguiendo el recorrido de la bola. Nunca se debe girar sobre el propio eje del cuerpo sin desplazarse detrás de la pelota (uno de los errores más frecuentes) pues se perderá de vista y se aminorará el alcance al situarse detrás. Cuando se completa el círculo, la pelota se queda situada delante del jugador, de modo que este puede devolverla eligiendo el golpe que mejor se adapte a la situación.
Aprendiendo la técnica del giro, se conseguirá devolver las bolas de manera efectiva y mejorar significativamente el juego en la práctica del pádel, es un movimiento que cuesta de ejecutar, pero que una vez aprendido nos permitirá defender y atacar con más probabilidades de alcanzar la victoria de la partida.