Lo que necesitas saber sobre la lesión de rodilla en el pádel

La rodilla es, sin duda, una localización de alto riesgo para el jugador de pádel y por ello hoy queremos describirte qué lesiones son las más propensas en la articulación de la rodilla

Las características técnicas del pádel generan un riesgo en el jugador en determinadas zonas corporales que deben ser fortalecidas con el fin de evitar cualquier tipo de lesión que nos retire de las pistas durante un largo periodo de tiempo.

La rodilla es, sin duda, una de estas localizaciones corporales en alto riesgo para el jugador de pádel y por ello hoy queremos describirte qué lesiones son las más propensas en la articulación de la rodilla y cómo prevenir cualquier tipo de dolor con una óptima preparación física.

Tendinitis Rotuliana

Como lesión la tendinitis es una de las patologías que más afecta a los deportistas habituales pero especialmente a los corredores, saltadores y jugadores de pádel, entre otros. La tendinitis rotuliana se produce por una inflamación en el tendón rotuliano encargado de unir a la rótula con la tibia y situado en la parte anterior de la misma.

Entre los movimientos habituales del pádel se encuentran los continuos cambios de dirección, salidas explosivas y frenadas bruscas que componen las causas de sufrir la tendinitis rotuliana. También otras causas están relacionadas con esta lesión como por ejemplo un calzado deportivo inadecuado, sobrepeso, déficit de fuerza en el cuádriceps, falta de flexibilidad, poca movilidad articular y sobrecargas por elevados volúmenes de entrenamiento.

Muchos de los factores físicos pueden prevenirse a través de sesiones de fortalecimiento muscular. Para empezar debes dedicar ciertas sesiones a trabajar tu tren inferior con ejercicios como los que te proponemos en el siguiente vídeo. Si decides entrenar con material (mancuernas, TRX, bosu, etc) debes tener en cuenta un consejo muy eficaz para prevenir cualquier tendinopatía: alarga la fase excéntrica del movimiento (aquella que va a favor de la gravedad) Esta pauta es ejecutada para objetivos específicos de prevención de cualquier tendinitis.

Lesión de ligamento cruzado Anterior

Aunque el número de jugadores de pádel que sufren una lesión de ligamento cruzado anterior sea inferior a la tendinitis rotuliana, la gravedad de la misma es bastante superior y podría afectar a nuestra salud articular durante un largo periodo de tiempo. Es por ello que debes prestar atención a los siguientes consejos si notas que la estabilidad de tu rodilla es mínima cuando juegas al pádel, o cuando realizas cualquier otra actividad.

La mayor parte de las lesiones pueden prevenirse si se detecta la necesidad a tiempo. Muchos deportistas, entre ellos jugadores de pádel, notan como su rodilla no se mantiene todo lo firme que debería ante cambios de dirección o movimientos laterales. Si esta es tu situación debes ponerte manos a la obra y fortalecer tu tren inferior de una manera funcional.

En primer lugar deberías dedicar más tiempo al trabajo del glúteo. Aunque parezca un músculo que se fortalece por pura estética, su funcionalidad es notablemente superior. En el caso concreto de la rotura de ligamento cruzado anterior el glúteo es el encargado de frenar el movimiento que lo provoca. Las sentadillas a una pierna contribuirán a reforzar la función de este músculo posterior.

Por otro lado, y paralelamente al trabajo de fuerza, debes centrar tus esfuerzos en ejercicios funcionales con reequilibrios. Materiales como el bosu, la fitball o el TRX te serán de gran ayuda. Nunca hagas estos ejercicios con cargas elevadas pues puede perjudicar gravemente la estabilidad de la rodilla. A continuación te dejamos un vídeo con un conjunto de ejercicios tanto de fuerza como de propiocepción de la rodilla.